martes, 24 de agosto de 2010

LIII

‎Y por alguna razón tenía en mi mano
El cadáver de un bebé jabalí
Y a la misma vez tenía frente a mí
Un bebé jabalí vivo en el piso
Entre mi persona y una pared

El bebé jabalí vivo me veía con confusión
Mientras yo miraba confundido al muerto en mi mano

Súbitamente, sin pensarlo
Le arrojé el bebé jabalí muerto al bebe jabalí vivo
Y en tono muy sincero dije:
—Conóscance

No hay comentarios:

Publicar un comentario